ENERGÍA HIDRÁULICA

 

 

 

La energía hidráulica se obtiene del aprovechamiento de las energías cinética y potencial de la corriente de ríos, saltos de agua o mareas. Además de ser renovable, se la considera una energía verde, ya que su repercusión en el medio ambiente es mínima y el agua que usa no se echa a perder. La energía hidráulica es la fuente renovable de electricidad más importante y más utilizada en el mundo. Representa un  19% de la producción total de electricidad, siendo
Canadá el productor más importante de energía hidroeléctrica, seguido por los Estados Unidos y Brasil.

Aunque esta energía represente un tanto por ciento tan elevado del total de la energía, se calcula que quedan por desarrollar aproximadamente dos tercios del potencial hidroeléctrico económicamente viable. La energía hidráulica no aprovechada es todavía muy abundante en América Latina, África central, India y China.

Denominamos gran hidráulica a aquellas centrales con una potencia mayor de10 MW; minihidráulica, centrales con una potencia entre 1 MWy 10MW; y microhidráulica, centrales con una potencia menor a 1MW. He aquí unos gráficos que muestran las instalaciones para la obtención de energía hidráulica obtenida en las minicentrales a nivel de mundial, del continente europeo y a nivel nacional.

En España

En el gráfico anterior hemos visto que España representa un alto porcentaje en la distribución europea de la energía hidráulica. Por comunidades, se distribuye así (año 2007):

Conclusión

La energía hidráulica tiene la cualidad de ser renovable, pues no agota la fuente primaria al explotarla, y es limpia, ya que no produce en su explotación sustancias contaminantes de ningún tipo. Sin embargo, el impacto medioambiental de las grandes presas, por la severa alteración del paisaje e, incluso, la inducción de un microclima diferenciado en su emplazamiento, ha des­merecido la bondad ecológica de este concepto en los últimos años.
Al mismo tiempo, la madurez de la explotación hace que en los países desarrollados no queden apenas ubicaciones atractivas por desarrollar nuevas centrales hidroeléctricas, por lo que esta fuente de energía, que aporta una cantidad significativa de la energía eléctrica en muchos países (en España, según los años, puede alcanzar el 30%) no permite un desarrollo adicional excesivo. Recientemente se están realizando centrales minihidroeléctricas, mucho más respetuo­sas con el ambiente y que se benefician de los progresos tecnológicos, logrando un rendimiento y una viabilidad económica razonables.